El Pais on Line.- El Fondo Monetario Internacional a quien ha recurrido Argentina para paliar sus problemas de financiación derivado de una política económica que no ha dado la confianza necesaria, ha rebajado las previsiones de crecimiento en todo el continente sudamericano.
En Bolivia mantiene un 4 por ciento, por debajo del estimado por el Gobierno (4,7%). La evidencia de la crisis afectará especialmente a las fronteras tarijeñas, tanto por Bermejo como por Yacuiba, que soportarán un flujo menor de intercambio comercial ante la inestabilidad de la moneda argentina, que en la jornada de ayer se cambiaba todavía a 27,52 respecto al dólar, es decir, cuatro veces más que el peso boliviano.
Para Tarija la situación es especialmente delicada por lo que toca a sus puntos fronterizos en un momento de recuperación económica como el actual, donde se empiezan a registrar datos de crecimiento positivo luego de tres años castigados por la baja de los precios de los hidrocarburos y especialmente, por la deuda acumulada por los proyectos comprometidos con respaldo precisamente en el barril de petróleo.
El secretario de Gestión Institucional, Rubén Ardaya, confía en que Tarija pueda resultar impermeable a la situación coyuntural del entorno en este preciso momento por la inyección de capitales que se está realizando a través de los fondos captados en fideicomisos y créditos, que precisamente ayudarán a mover una economía castigada con anterioridad y que sería la misma afectada por la actual coyuntura.
El entorno continental
El Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó el lunes las previsiones de crecimiento económico de América Latina (AL) al 1,6 por ciento (%) en 2018 y el 2,6% en 2019, cuatro y dos décimas menos, respectivamente, que lo calculado en abril, debido a la ralentización del crecimiento en Argentina, Brasil y México.
“Las menores estimaciones dan perspectivas más difíciles para economías clave, debido a condiciones financieras más ajustadas y la necesidad de consolidación política (Argentina), los efectos continuados de huelgas (Brasil), y las tensiones comerciales sobre la renegociación comercial y la agenda del nuevo gobierno (México)”, señala el informe del FMI.
Los nuevos cálculos del informe de Perspectivas Económicas Mundiales del FMI rebajaron el crecimiento de Brasil en cinco décimas para 2018 hasta el 1,8% y lo dejaron sin cambios para 2019 en el 2,5%, mientras mantuvieron este año las de México en el 2,3 % y recortaron las del próximo en tres décimas al 2,7 %.
La entidad ya redujo en mayo la previsión de la Argentina al 2% por la crisis cambiaria que sin embargo se ha acelerado en los últimos meses, por lo que en la actualidad está en evaluación y sin criterio.
Una reunión con Macri tres veces postergada
El impacto de la economía argentina en la realidad boliviana es uno de los puntos en la agenda a tratar entre los presidentes Mauricio Macri y Evo Morales, que sin embargo hasta la fecha no se ha producido.
En 2017 se anunció hasta tres veces, una en Buenos Aires para el 15 de Abril, otra en septiembre y finalmente a finales de año en Jujuy. Ninguna de ellas se ha concretado salvo un breve encuentro en la cumbre del Mercosur en Rosario, donde se abordó el tema de Venezuela.
Otro asunto pendiente es la propuesta argentina de comprar más gas y más caro en invierno y menos en verano, que dejó pendiente el exministro Juan José Aranguren.