La localidad sureña de Tarija; Bolivia; confirmó su primer caso de coronavirus y en consecuencia, Salvador Mazza determinó cerrar sus accesos, incluyendo los accesos informales a uno y otro lado de la frontera. Entre estos destacan los fondos de casa de varios residentes de la localidad argentina, por donde ingresan ciudadanos bolivianos. Ante infracciones, se avisó, habrá detenciones.
El Servicio Departamental de Salud; Sedes; de Tarija, emitió un comunicado informando sobre el primer caso de coronavirus en el departamento boliviano. Se trata de un sacerdote que presentó problemas estomacales y respiratorios luego de una visita a Cochabamba. No solo el clérigo debió ser asistido, sino que también se incluyó al personal médico, bomberos y gente del convento donde habitaba.
Por su lado, el COEM del municipio argentino, se determinó cerrar completamente los accesos; abarcando también al Puente Internacional; permitiendo paso solo a los camiones para abastecerse; medida que ya han aplicado en diferentes puntos del departamento y que en Mazza inició a las 00 horas de este lunes 30 e marzo, informó el periodista Raúl Costes.
La duda que se plantea es hasta que punto se infringe el Artículo 14 de la Constitución Nacional; es decir, hasta que punto el intendente Rubén Méndez excede de las funciones que corresponden a su autoridad.
Los puntos de control que instaló Gendarmería Nacional Escuadrón 61 se ubican en Arenales y Caraparí. Por otro lado, también se anticipó (y advirtió) a los residentes con casas que limitan con barrios de San José de Pocitos (Bolivia) que se apostarán controles en estos domicilios para evitar así el tránsito de extranjeros hacia suelo argentino.
Como sanción, tanto el ciudadano extranjero que no pueda justificar el punto (legal) de ingreso ni acreditar residencia en tal o cual dirección será detenido y con él el propietario de la vivienda por donde ocurre todo.