Sucedió el fin de semana último. La enorme feria que se arma en la Plazoleta “República de Bolivia” en barrio 200 Viviendas, más conocida como Moto Méndez, fue visitada por personal de la Dirección Municipal de Fiscalización y Control. Los puesteros se oponen al pago de tasas que exige el municipio a su rubro. Ante la comuna, figuran como vendedores ambulantes, que es la tasa que eligen pagar.
Ocurrió durante el último fin de semana en Tartagal. Los puesteros de la Feria de Moto Méndez; como se conoce localmente; fueron visitados por personal de la Dirección de Control y Fiscalización de la Municipalidad. Cundió indignación entre los stands dispuestos dado que muchos están registrados como Vendedores Ambulantes, con lo cual pagan una tasa impositiva muy diferente a la que abonaría un vendedor con puesto fijo.
La comuna les recordó que si no se registran como corresponde para abonar el tributo que establece la categoría no podrán seguir trabajando en ese sector. Para muchos es un golpe económico, ya que la Feria convoca a gran cantidad de gente el fin de semana.
Los que se oponen a la presencia de esta “mini Saladita” resaltan que no cuentan con un espacio salubre para la venta (hay puestos de comida), que han vuelto riesgoso transitar por Ruta Nacional 34 cuando se circula por ese punto, y que usurpan un espacio público sin ningún tipo de autorización.