Ayer martes por la tarde, en un control de rutina de Gendarmería Nacional Escuadrón 54 se detuvo a un camión con placas del Estado Plurinacional de Bolivia para controles de rutina. En la inspección se descubrió que transportaba 90 kilos de cocaína, ocultos en tanques de compresión. El camionero viajaba de norte a sur y no llevaba carga.
De acuerdo con el informe de Gendarmería Nacional, el camión transporte de carga procedía del Estado Plurinacional de Bolivia, e iba ocupado por dos hombres de nacionalidad boliviana, con destino hacia la provincia de Santa Fe.
Durante la inspección del acoplado, los uniformados observaron irregularidades en la tapa de un tubo cilíndrico metálico color rojo con signos de haber sido colocado recientemente, debajo del piso de madera.
Al desarmarlo y abrirlo ante testigos, encontraron 25 paquetes con una sustancia polvorienta blanca.
Al continuar con la requisa de un segundo tubo color negro contiguo al primero y de otro ubicado debajo de la cabina del camión, colocados para fingir ser parte del sistema de frenado del rodado, se los extrajo para realizar la pruebas de campo Narcotest; que confirmaron que trasladaban polvo blanco a granel resultando positivo para cocaína, con un peso total de 90 kilos 899 gramos.
El Juzgado Federal Tartagal orientó el secuestro del estupefaciente y del vehículo, como así también la detención de ambos ciudadanos.