Dos hermanas, madres solteras, ocuparon las instalaciones del Centro de Salud de Barrio Tomás Ryan, lugar donde habitan desde hace un día. A pesar de llevar años abandonado, el único servicio con el que no cuenta es agua. Los vecinos denunciaron anónimamente la usurpación. Las mujeres aseguran que no tienen otro lugar adónde ir.
Cada una de las hermanas tiene un hijo; menor de edad; y aseguran que ingresaron al lugar “por necesidad”. Saben que los vecinos han realizado llamadas anónimas denunciando la usurpación y respondieron que el lugar estaba en completo abandono, con varias fichas de salud que fueron dejadas allí hace tres años; aproximadamente; cuando se dejó el lugar.
Como detalle, contó que hallaron fichas de salud de niños de la familia, que se presumían extraviadas.
En consecuencia, luego que el Centro de Salud se abandonó, fue desarmado de a poco por los mismos residentes de alrededor, que sacaron ventanas y puertas, dejando una sola. “Los policías sacaron fotos, ellos vieron el estado en que estaba esto”.
A pocos metros reside un agente sanitario, relató y “nunca gestionó nada de esto, no tenemos Comisión, ni tampoco presidente de barrio, no tenemos nada”.
Las dos mujeres vivían en casa de sus padres, en donde ahora quedaron cuatro personas; sus padres y hermanos menores.
“Somos dos personas grandes, nací y me crié en este barrio (…) no quieren dar la cara los vecinos, porque saben el estado estaba esto. No sé por qué ahora opinan y dicen que somos mala gente”, dijo la menor de las hermanas, en referencia a llamadas anónimas que se realizaron a Policía avisando de la usurpación.
Aseguran que solo se irán si se gestiona por vía legal pero “dándonos un lugar a dónde irnos”, remató.