El lote, que permanece sin habitar desde hace varios años, fue usurpado el martes por la tarde. Cinco familias lotearon el lugar y se asentaron ante la sorpresa de los vecinos, quienes dieron urgente aviso a la propietaria. De entre los supuestos “necesitados” señalaron a un habitual okupa de terrenos, que posteriormente los vende al mejor postor.
Pasadas las 15 horas del martes 3 de diciembre, un grupo de personas ingresó y loteó la esquina de calle Juan Larrea y Congreso, espacio propiedad de la familia Luraschi. A raíz del fallecimiento de los padres y dejar una casa desocupada, los herederos demolieron el hogar y quedó solo el terreno, deshabitado desde entonces.
El lugar se ubica a una cuadra del Servicio de Emergencia 911. La propietaria se hizo presente al ser alertada por los vecinos y a pesar de exhibir el título de propiedad, los efectivos de Policía no desalojaron el predio, declararon los testigos.
Un punto de alarma para quienes residen allí es que de entre los proclamados “carenciados” reconocieron a un okupa con antecedentes de usurpación, adjudicación de terrenos y posterior venta del lote conseguido.
El predio linda con la Costanera de Río Tartagal y en pocas cuadras alrededor dispone de comercios varios por su cercanía a la Plaza 25 de Mayo de Villa Saavedra, centro de actividad en el sector, además de situarse a 15 minutos a pie del centro.