La crisis en la fauna ictícola del río Pilcomayo se abordará este jueves en Villa Montes, en un encuentro al cual fueron citados la Organización de Capitanías Weenhayek de Tarija, instituciones y organizaciones sociales. Se definirán acciones, ya que el pueblo Weenhayek pide otras alternativas económicas antes de suspender la pesca comercial. También se invitó a la municipalidad de Santa Victoria Este, por Argentina.
Hasta el martes pasado, solo habían confirmado su participación autoridades regionales y de la Gobernación de Tarija, de invitaciones efectuadas a la Oficina Técnica Nacional de los ríos Pilcomayo y Bermejo (OTN-PB), Comisión Trinacional del río Pilcomayo, Intendente de Santa Victoria (Salta – Argentina), Asamblea Regional del Chaco, Concejo Municipal de Villa Montes, Alcaldía de Villa Montes, Gobierno Regional de Villa Montes y Asamblea Legislativa Departamental de Tarija. El jefe grande del pueblo Weenhayek, Francisco Pérez, dijo era intención que la comunidad Wichi del norte argentino fuera parte.
La comunidad Weenhayek, Guaraní y Tapiete serían las más afectadas si la pesca (comercial) se prohíbe por tres años, ya que se extendería a transporte, comerciantes, turismo, entre otros; sin obviar que el Pilcomayo es fuente de alimento y subsistencia para las familias indígenas. Esta época en particular se centra en la pesca de sábalo, de allí que la gobernación de Tarija convocara a biólogos expertos para analizar la situación del río Pilcomayo; ya además presenta un llamativo retroceso en su caudal, como el río Paraná en territorio argentino.
“El río Pilcomayo en estos momentos está con muy poca agua con respecto a los años anteriores en las mismas fechas, por lo tanto, ese puede ser uno de los motivos, pero está claro que debemos dejar en manos de los expertos y que ellos nos digan exactamente qué es lo que hay que hacer para que el sábalo repoble el Pilcomayo”, afirmó Pérez, agregando también que otro punto es la contaminación minera. (ElPaís.bo)