El caudal del río Pilcomayo en el territorio de Villa Montes registra un caudal de 0,50 metros, en notable contraste con un nivel que superaba 1,50 metros. Efraín Rivera, secretario de Desarrollo Productivo, Recursos Naturales y Medio Ambiente de la Gobernación de Tarija, atribuyó la drástica disminución a la escasez de lluvias.
El último informe emitido por las autoridades de control de monitoreo del río Pilcomayo, tanto en Bolivia como Argentina, detallaba que en Estación Misión la Paz-Pozo Hondo (Argentina-Paraguay) el caudal seguía en bajante pero estable este miércoles 4, con 2.75 metros desde el domingo 1 de octubre. En la Estación Villa Montes (Bolivia), el registro arrojaba 0.51 metros; oscilando entre 0.50 y 0.52 metros; al punto que podía cruzarse a pie.
El caudal viene experimentado una drástica disminución en cifras históricas debido a la escasez de lluvias estos últimos meses, que en el caso de Villa Montes el nivel de agua solía tocar 1.89; sumado a que en semanas recientes, el Sistema de Alerta Temprana Pilcomayo de la Comisión Trinacional para el Desarrollo de la Cuenca alertaba sobre un histórico retroceso de 15 centímetros comparado con mediciones de 2022, marcando así un nuevo mínimo histórico.
Entre los motivos y factores que llevaron a la actual situación hídrica se señalan la canalización no autorizada de agua, sedimentación, explotación ictícola, falta de políticas públicas adecuadas para la gestión del recurso hídrico y contaminación con metales pesados y aguas residuales. Se teme que los tres países que conforman la cuenca; Bolivia, Argentina y Paraguay; repitan lo sucedido entre octubre y noviembre del año pasado, cuando el flujo de agua se cortó, afectando sobre todo el punto Santa Teresa (Proyecto Pantalón), entre Argentina y Paraguay. (ElPaís.bo)