El Dr. Marcelo Vidal, especialista en tocoginecología del Hospital “Juan Domingo Perón”, enfatizó que el sector de salud en Tartagal no cuenta ni con recursos humanos o tecnológicos para abordar diagnóstico o tratamiento contra el cáncer de pecho, más allá que la enfermedad es superada en número por el cáncer de cuello uterino.
Este 19 de octubre se recuerda el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Mama, enfermedad que en Argentina afecta a 1 de cada 8 mujeres. El Dr. Vidal (M.P. 3240) comenzó detallando que los signos que pueden resultar en el diagnóstico son bultos en la mama o la axila (debajo del brazo), aumento del grosor o hinchazón de una parte de la mama, irritación o hundimientos en la piel de la mama, hundimiento del pezón o dolor en esa zona, secreción del pezón (que no sea leche); incluso de sangre; cualquier cambio en el tamaño o la forma de la mama ó dolor en cualquier parte de la mama.
Sin embargo, en Tartagal; resaltó; “no se pueden realizar mamografías, ni en la parte pública ni en el privado (…) además, hoy es necesario que sean digitales, tecnología del Siglo XXI que permite detectar más temprano un potencial tumor (de hasta 1 centímetro de diámetro) y para el que se necesita un especialista en detección por imagen y que tampoco hay acá”, reconoció. Al hospital zonal llega un mastólogo para atención cada mes o cada dos meses, con turno que se otorga una vez confirmada la llegada del doctor.
El profesional médico agregó que, pese a lo crítico de la situación, en Tartagal y la zona, el cáncer con mayor incidencia es el de cuello uterino. No obstante, “hacen falta patólogos (…) los diagnóstico demoran tres meses y el paciente cae en ansiedad y quiere el diagnóstico en cinco días y si se deja estar, pasan tres a cinco años dejando evolucionar la enfermedad”, continuó. Recordó que la primera mamografía debe realizarse a los 35 años y desde los 50 a los 62 años de manera periódica (cada dos años), aparte de autopalparse para reconocer cualquier anomalía.