En controles de rutina que realizaba personal de la Dirección de Bromatología sobre Avenida San Martín, un comerciante que disponía a la venta productos de nacionalidad boliviana destruyó los productos para evitar el decomiso. Extraoficialmente, aseguraron que lo incautado se destina como donación a otros lugares. Desde la Dirección de Control y Fiscalización aseguran que los controles son regulares y bajo la normativa municipal.
La directora de Control y Fiscalización, Silvana Fernández, declaró que debieron intervenir dado que el comerciante en cuestión; al ser notificado del decomiso por venta de productos no nacionales; tomó un elemento cortante y fue abriendo los envases que contenían los líquidos (gaseosas, cervezas, yougures), dejando correr todo en la vereda. “Estaba el peligro que alguien pudiera resbalar y caer”, afirmó, “pero también, esta persona pudo haber dañado a alguien del personal”.
Fernández recordó que el trabajo se enmarca en las normativas municipales y además, se informó a los comerciantes sobre el uso de la vereda, las regulaciones de Anmat y lo establecido por el Código Alimentario Argentino. “Hay productos de Bolivia que están prohibidos en Argentina por sus compuestos (…) pero también hay que tener en cuenta si ingresa de manera legal o ilegal”, dijo.
El comerciante aseguró que; más allá de la regulación y el control; “dijeron que estaba prohibido vender la marca de gaseosa y cerveza (NR: Coca Cola y Paceña), todo producto de Bolivia (…) tenemos todo en regla, pero ya tuvimos un decomiso anterior y todo apuntó a productos de Bolivia (…) todo es porque hay comerciantes de Tartagal que dicen que somos competencia desleal pero el que nos denuncia también vende productos vencidos o extranjeros y no le dicen nada”, expuso. Extraoficialmente, otros comerciantes aseguran que la Municipalidad dona la mercadería incautada a los más necesitados, señalando que cuentan con videos y fotos del proceder.
