El Rio Pilcomayo registraba hoy miércoles 6.31 metros en Puente Aruma y 3.63 en Villa Montes, con tendencia ascendente en ambas localidades bolivianas. Del lado argentino, en la estación de Misión La Paz se medían 6.73, con nivel en descenso. Esta última comunidad volvió a quedar aislada y su mayor problema hoy es el desabastecimiento de alimentos.
El paso a Misión La Paz se restableció finalmente para el tránsito con precaución conforme avanzó el miércoles. El martes se inundó nuevamente la Misión Padre Coll, situada a dos kilómetros de Santa María Este. El panorama que se encuentran los pobladores que vuelven a sus hogares no deja de ser desolador, lo que los ha llevado a considerar medidas a futuro.
A las 19:30, en Puente Aruma se registraba 6.03 metros en el Pilcomayo, con niveles en descenso. En Villa Montes se midió 3.34 metros y se mantenía estable según el dato tomado a la misma hora, y en Misión La Paz estaba en 6.48 metros y descendiendo, a las 18 horas.
Desde muebles hasta medios de transporte como motos y bicicletas, hogares arrasados, cosechas perdidas y animales muertos, máquinas perdidas o arruinadas, son algunas de las realidades que se encuentran los retornados.
“La gente de La Curvita, el cacique dijo que no piensas regresar nunca más, sino que se irán más arriba, a San Matías, sector que está antes de llegar a Hito 1”, contó Fernando Soria, poblador y voluntario de la región.
El dirigente; Mario Segundo; dijo que con las perdidas máquinas (de soldar) quería impartir cursos de capacitación para los jóvenes, intención que ahora no podrá ser. “La Curvita fue la primera en sufrir la inundación, el agua llegó al metro dentro de la comunidad y en el camino a los dos metros (…) no querían irse en la madrugada cuando fueron a buscarlos (…) al ver lo que era fuera del pueblo se asustaron”.
Para muestra, Soria compartió imágenes donde se podía observar en los árboles y maleza del camino el nivel que alcanzó el agua en los pasados días.
Hasta el miércoles 14, a tempranas horas, el camino a Misión La Paz estaba cerrado y con él, quedaban aislados los parajes Las Vertientes, Árbol Solo, El Estanque y todas las que siguen; mientras que sierra más abajo, incluso La Sierra estaba bloqueada, ya que no se podía llegar ni por el camino de Santa Victoria ni Morillo.
“La crecida fue muy grande, el agua del Pilcomayo se desplazó más de 140 km, por La Merced casi llegó a Morillo (Rivadavia Banda Norte) e incluso llegó a pasar la Cañada Ramón Lista (Formosa)“, graficó, “Invadió todo el chaco salteño”, dijo el poblador, que como todos espera que las lluvias cesen para reconstruir los parajes afectados.
Varias donaciones llegadas en ropa, calzado, colchones, plásticos (los originarios piden chapas para sus hogares) y alimento no perecedero estaban varadas por el cierre de caminos. “Los comerciantes, en Santa Victoria y Misión La Paz, ya estaban desabastecidos y la única forma que podría llegar seria vía aérea”, concluyó.