Pablo Arequipa, secretario de la Producción de ese municipio, destacó que la principal preocupación planteada en la audiencia pública fue el cupo laboral para los locales. “Hubo alguna incertidumbre respecto a algunos datos, pero para eso es una audiencia pública (,..) En Aguaray hay un 60 por ciento de desocupación (…) es normal que la gente mire más eso”, reseñó.
El secretario dijo que el tema laboral no debería haberse planteado de la manera en que resultó, ya que la cuestión de fondo pasaba más por lo ambiental y el impacto que tendría en la comunidad.
“La importancia de la gente sobre este punto es qué beneficios va a traer en la zona la inversión, sobre todo para la parte social (…) ya sabemos que tendrá un impacto ambiental, sobre todo lo relacionado con el petróleo (…) por lo cual debe traer un beneficio o un desarrollo”, enfatizó Arequipa.
“Es una zona agropecuaria, con muchos recursos naturales y debemos ver que sean bien administrados, buscar un equilibrio”.
Al cierre de la audiencia (“y teniendo en cuenta que hubo muy poca difusión”), se acordó con el responsable comunitario de la Tecpetrol; Gustavo Marquiegui; una nueva reunión, para establecer la articulación privado-sociedad (municipio y comunidad) dentro de la política social de la empresa, “que esté afinada acorde a las necesidades de la región”.
Con el 60 por ciento de desocupación y 50 por ciento de necesidades básicas insatisfechas, el secretario de gobierno adelantó que espera que la Tecpetrol, por intermedio de la responsabilidad social empresarial, pueda acordar diversos emprendimientos, como una Bolsa de Empleo y evitar situaciones como la de la audiencia.
De este encuentro, llevado a cabo en comunidad El Agarrobal, participaron también legisladores municipales y del departamento (Gabriela Martinich entre ellos), y del Sindicato Privado de Petroleros.
