Minutos antes de las 19 del miércoles, un temporal inesperado golpeó con violencia a la localidad fronteriza de Aguas Blancas. En cuestión de minutos, el viento arrasó con techos, árboles y postes de luz, dejando a gran parte de la ciudad completamente a oscuras. Las ráfagas fueron tan intensas que numerosos vecinos registraron la escena con sus celulares: las imágenes muestran chapas volando, estructuras destruidas y postes derrumbados sobre calles y veredas.
Desde EDESA confirmaron que el sistema eléctrico quedó seriamente afectado. Sus cuadrillas trabajan contrarreloj entre cortes de energía, barro y cables caídos para restablecer el servicio, aunque advirtieron que la tarea es compleja y llevará varias horas.
El interventor de Aguas Blancas, Adrián Zigarán, informó que los daños materiales alcanzaron distintos sectores de la ciudad: viviendas particulares, espacios públicos, el puesto de control en el puente internacional y gran parte del tendido eléctrico y alumbrado público.
Por su parte, la Dra. Agustina Esteban, coordinadora de políticas sociales del Ministerio de Desarrollo Social declaró en FM Alba que “el municipio aún está trabajando en establecer la cantidad de familias afectadas por el temporal”. Además, señaló que el ministro Mario Mimessi se comunicó de inmediato con el interventor para coordinar la asistencia.
“Estamos llegando con chapas, plásticos, colchones y módulos alimentarios de emergencia”, manifestó la funcionaria, subrayando que la prioridad es brindar contención a las familias que sufrieron pérdidas materiales.
Contexto
- El temporal sorprendió a la localidad sin alertas previas, lo que generó momentos de pánico entre los vecinos.
- El puesto de control en el puente internacional, clave para el tránsito hacia Bermejo (Bolivia), sufrió daños que obligaron a reorganizar la seguridad fronteriza.
- Defensa Civil y Bomberos Voluntarios trabajan en conjunto para despejar calles, retirar árboles caídos y asistir a las familias más vulnerables.
- Se espera que en las próximas horas se realice un relevamiento oficial para determinar el número exacto de damnificados y cuantificar los daños.
La comunidad de Aguas Blancas enfrenta ahora el desafío de reconstruir lo perdido, mientras las autoridades provinciales y municipales coordinan la llegada de ayuda inmediata.
