El secretario legislativo José Romero realizó un pedido de disculpas al personal femenino de la administración pública en general, sin citar a la concejal Margarita Rauch; mientras que el presidente del cuerpo, Armando Leguizamón, optó por dejar el asunto en manos del abogado Rambert Ríos. En su breve disertación, aseguró que la edil Rauch asume rol de víctima sin serlo.
La sesión ordinaria de la fecha contaba con un temario que encabezaba el expediente 17.838/24, informe interno de Margarita Rauch, elevando copia de la denuncia radicada el 10 de abril ante la Oficina de Violencia Familiar y de Género de Tartagal. Previo al izamiento de bandera y lectura del temario, el secretario legislativo Romero pidió uso de la palabra y expresó disculpas por su accionar, pero sin dirigirse particularmente a la edil en cuestión.
A su turno, ya concluida la lectura del temario y abordando (tras homenajes) el expediente en cuestión, la concejal Rauch reiteró su postura sobre lo ocurrido y a su turno, Leguizamón cedió su lugar de presidencia a Carolina Bustillos para referirse al tema. Señaló que por consejo de su abogado (Rambert Ríos) se limitaba a dejar el tema en el plano judicial, agregando que; a su entender; Rauch se coloca en un lugar de víctima que no corresponde por algo que no sucedió. Las vicepresidentes del Concejo no hicieron comentario alguno.
Entre los pedidos de palabra, los concejales Raúl Camacho, Ramón Ramos y Luis Rivero expresaron también sus posturas, rechazando la violencia de género; y en el caso de Ramos, remarcando que en su caso particular no podía referirse a una situación de la cual no le consta que sucediera. Entre las medidas asumidas para el desarrollo de las sesiones ordinarias, que se transmiten a través de la red social Facebook, se podía observar que limitaron los comentarios y en el recinto, los micrófonos se habilitaban tras permitir el uso de la palabra.
