Nacionales.- Después de una sesión maratónica de doce horas, la Cámara Baja dio luz verde a una iniciativa que fue muy cuestionada por parte de la oposición, que generó fuertes discusiones en el Congreso y violentos enfrentamientos en las calles. Fuerte repudio de la oposición y cacerolazo en madrugada en varias ciudades del país.
La Cámara de Diputados sancionó este martes por la madrugada la Ley de Reforma Previsional con una votación terminó con 128 votos a favor, 116 en contra y 2 abstenciones.
La iniciativa dispone cambios en la fórmula de actualización de las jubilaciones, que pasarán a actualizarse en un 70% por inflación y 30% por variación de salarios. Esto resulta en una suba menor que con el sistema actual, que combina la recaudación con el aumento del costo de vida.
Es por esto que se les entregará un bono a los jubilados, para compensar el desfasaje del paso de un sistema a otro, aunque la oposición lo criticó por considerarlo insuficiente.
En el discurso de cierre, el jefe de la bancada K Agustín Rossi volvió a hacerles fuertes críticas a la iniciativa. Dijo que el proyecto “contempla las sugerencias del Fondo Monetario Internacional(FMI)” y acusó al Gobierno, al que calificó de “derecha”, de “recortar por lo más delgado cuando gobierna”.
El kirchnerismo, la izquierda y el Frente Renovador pidieron en dos oportunidades que se levantara la sesión pero no lo consiguieron. Tampoco prosperó el pedido de la diputada massista Graciela Camaño de que la iniciativa volviera a Comisión de Previsión y Seguridad Social de la Cámara Baja.
Previo a la votación los diputados hicieron un minuto de silencio en homenaje a los 39 muertos por el estallido social del 20 de diciembre, en medio de una enorme crisis política que terminó con la renuncia a la presidencia de Fernando de la Rúa.
La sesión arrancó el lunes, en un día de cruces entre los manifestantes que desde la primera hora se acercaron a un Congreso vallado para repudiar el proyecto. La policía contuvo la situación hasta que comenzaron a volar las primeras piedras. Ante esto, los efectivos respondieron con balas de goma, gases lacrimógenos y los chorros de agua del camión hidrante.