Mario Espeche, presidente de la Asociación de Centros Privados de Diálisis de Salta y Jujuy, refutó que el Hospital Público estuviera habilitado para realizar la práctica como viene realizándose desde hace dos meses en el sector de Oncología. El señalado en esta irregularidad es el Dr. Juan López, gerente del nosocomio, quien aparentemente buscaba lucrar con un emprendimiento particular.
El Dr. Espeche declaró a través de la señal televisiva de Canal 4 que la práctica se descubrió luego que el Hospital Zonal pagara al prestador el dinero requerido y luego pidiera reintegro al Ministerio de Salud Pública. “Obviamente, no pudieron habilitar ese pago porque no hay una institución allí que ese habilitada para realizar la prestación”, remarcó.
Así, de las dos máquinas que se utilizan (desde hace dos meses) para realizar diálisis en el nosocomio, “por lo menos una la compró el Dr. Juan López (gerente general y de manera particular), si no las dos”, expuso. La gravedad del hecho va más de irregularidades, ya que también incluye perjuicios al erario público y faltante de recursos (gasas y jeringas) para la atención. Espeche resaltó que la compra de máquinas corrió por cuenta de López, pero no está claro todavía si con fondos propios o públicos.
Cabe tener en cuanta que la única institución que habilita centros en el país para realizar la práctica de diálisis es la Confederación Argentina de Diálisis y en la provincia de Salta, los únicos permitidos para ello (crónico) son los hospitales Dr. Arturo Oñativia y San Bernardo, ambos en Capital.
Espeche denunció el hecho y solicitó informes al Ministerio de Salud, al encontrarse con una factura a nombre del Hospital. También solicitó informes al PAMI Tartagal y PAMI Salta al respecto (debido a que pacientes con su obra social se dializaron en este tiempo) y no se han acercado respuestas por ahora.
El Hospital de Tartagal, por lo tanto, no está habilitado por ningún organismo responsable para realizar la práctica de diálisis; ni crónico ni agudo. El grupo del Dr. Espeche solía estar a cargo de la misma; por años y sin remuneraciones de parte del nosocomio; y una de las preocupaciones pasaba por la atención de pacientes sospechosos o que sufrieron Covid-19.