Con un memorable show y un verdadero homenaje a lo mejor de su tierra, Los Kjarkas desplegaron 46 años de música en el Festival, donde no faltó tampoco el agradecimiento de la Municipalidad de Aguaray por la presencia. El grupo recibió una placa artesanal de su paso por las tierras norteñas.
El despliegue del grupo comenzó lentamente y levantó ritmo en la última media hora, con el público de pie, ovacionando y aplaudiendo.
El estadio de la cancha de Campo Durán, prácticamente lleno, disfrutó y coreó los temas y los más afortunados, en primera fila, pudieron recibir el saludo de mano de Elmer Hermosa y Makoto Shisido (charango y coros), que fueron los integrantes que más se acercaron al público, y hasta pudieron obtener una foto junto con Hermosa.
No faltó el baile típico de Bolivia, a cargo de un grupo de cuatro bellas bailarinas, que presentaron los ritmos de caporal, saya, huaino y tinku sobre el escenario.
De fondo, la gran pantalla alternaba imágenes típicas de Bolivia, su gente, monumentos históricos y del show.
De manos del intendente Alfredo Darouiche y la Comisión del Festival, Los Kjarkas recibieron una placa elaborada en madera y tejido, recordatorio de su paso por el escenario de Aguada del Zorro.