Un niño de 13 años fue atacado anoche por un perro raza pitbull en Barrio Gregorio Torres, en el sector sur de la localidad. La madre del menor y la dueña del perro se trenzaron en fuerte pelea, ya que la propietaria del can acusó que el chico tuvo la culpa. El niño sufrió graves daños en brazo izquierdo, cadera y piernas, quedando hospitalizado. Aviso: imagen puede causar impresión.
Según el relato de la madre, alrededor de las 20:30 de anoche, el chico fue a buscar un caballo y debió atravesar por el frente de la propiedad de una familia que tiene tres perros; dos de razas pitbull. Todo comenzó con una pelea de perros, siendo atacado este animal y por razones que no se precisan, acaba mordiendo al jovencito.
El perro atacó piernas, cadera y brazo izquierdo del chico. “(Los dueños) No han reaccionado, no le dijeron nada (…) fue mi yerno y con los vecinos para soltarlo (…) mi hijo gritaba y no podía soltarse”, contó la mujer al periodista Juan Espinoza. Esta mañana la familia pudo radicar la denuncia sobre lo que aconteció.
Del relato de la madre se desprende que el can mordió en la cadera al niño y lo arrastró de un frente de vereda a otro. Por las heridas que recibió fue llevado de urgencia al Hospital Público de Mosconi, donde quedó para observación y atención.
Todavía más, la propietaria del perro se acercó hasta el hospital y ante los reproches de la madre por no haber actuado al ver lo que ocurría, acusó que el chico “hondeaba” al animal y por eso fue atacado, lo que provocó la reacción de la mujer y ambas quedaron trenzadas de los cabellos. Por esto, ahora se encuentra con una denuncia en su contra, radicada por esa vecina.
Cabe recordar que ante el ataque registrado de un perro a una persona, la medida que suele aplicarse es el deceso, más tratándose de una raza peligrosa como el pitbull.
No es el primer caso de ataque de los perros de esta familia, ya que los vecinos; solidarizados con lo que pasó; hicieron públicas las denuncias que asentaron por hechos similares. La familia agregó que cuando quisieron radicar lo sucedido ante la Policía, los agentes les respondieron que debían volver a las cinco de la mañana.