Un grupo de 30 personas, entre residentes en barrios de la zona suroeste y afines, marcharon hoy hacia la oficina de Aguas del Norte en Tartagal ante la prolongada falta del recurso en el sector. La empresa informaba esta mañana que el caudal en el río Caraparí continúa con bajos niveles y afecta a la captación en el Dique Itiyuro, lo que lleva a cortes y baja presión la localidad, Aguaray y Mosconi.
Usuarios del B° Santa María I, Provincias Unidas y ciudadanos que se unieron a la marcha encabezaron manifestación ante la sede del organismo en Tartagal. En la recorrida, que partió de zona suroeste, se detuvieron ante la oficina de la delegación del Ente Regulador a una breve reunión con Silvia Raful (titular) antes de proseguir marcha hacia Aguas del Norte, donde impidieron el ingreso a la sección de cobros; sobre calle Warnes. Los residentes enfatizaron que la problemática no es nueva y se arrastra desde hace 14 años (2009), y en el periodo estival suele extender hasta 20 días el plazo que están sin agua.
La marcha fue convocada por la misma usuaria que había llevado a cabo una huelga de hambre en julio. Por otro lado, no dejaron de resaltar que; ante la emergencia por falta de agua en toda la ciudad y la región bajo cortes y baja presión rotativos; se observan derroches como lavado diario de autos y veredas (principalmente en sectores céntricos) mientras que los camiones abastecedores recorren los barrios y parajes para proveer. “No queremos intervención de autoridades”, dijo una manifestante (Luis Rivero, concejal electo, participó de la marcha), “mucho se habló y el agua la queremos ahora”.
El titular responsable de la oficina de Aguas del Norte en Tartagal no se encontraba en la ciudad al momento de la manifestación, de acuerdo a lo informado por el personal. “Somos 120 familias en Santa María I las que vivimos con este problema, de cinco personas cada una y menores de edad (…) además, en otros barrios sucede que hay casas con dos plantas donde viven familias distintas y sucede que se abastece un tanque para los que residen en planta baja pero no para los que residen en planta alta y se tiene que volver a pedir agua, tocando esperar mientras vemos cómo se derrocha lo que a otros le falta”, concluyó la manifestante.