La justicia avanza en la investigación sobre Néstor Adrián González, un empresario de 61 años oriundo de Salvador Mazza, quien es señalado como el principal organizador logístico de una red de narcotráfico que intentaba trasladar 425 kilos de cocaína ocultos en cubiertas de camión en General Mosconi. La operación, descubierta por la fiscal Lucía Orsetti, destapó una estructura sofisticada de tráfico de droga con conexiones internacionales.
González, registrado como monotributista en rubros inmobiliarios y de alquiler de salones, es sospechado de liderar una flota de camiones modificados con dobles fondos, utilizados para trasladar cargamentos de cocaína desde Bolivia hacia distintos mercados. La droga, marcada con símbolos habituales del narcotráfico boliviano, tenía un valor inicial de 3.000 dólares por kilo, cifra que aumenta exponencialmente en circuitos internacionales.
El empresario fue detectado por las autoridades en una estación de servicio cercana al lugar del allanamiento, pero logró huir en dirección a Aguaray, lo que llevó a una intensa búsqueda. Tras permanecer casi dos semanas prófugo, finalmente se entregó a Gendarmería en San Pedro, Jujuy, en un giro inesperado del caso.
La Fiscalía analiza documentación incautada, teléfonos celulares y registros de pagos para determinar la magnitud de la red y los posibles vínculos de González con otros actores del crimen organizado. Se espera que en las próximas horas avance su indagatoria judicial, mientras su defensa prepara la estrategia legal ante un expediente que continúa sumando pruebas.
