Las únicas dos empresas de servicios urbano de colectivos que trabajan dentro del éjido municipal continúan con el recorrido diario pero bajo normas dirigidas a prevenir la propagación del coronavirus.
Con el objetivo de comprobar que; efectivamente; tanto el transporte urbano de colectivos como los usuarios acatan las nuevas conductas responsables en su uso, periodistas de la emisora viene transitando junto a las diferentes líneas cada uno de los corredores.
De una primera semana acompañando los recorridos, se pudo observar que tanto choferes como inspectores monitorean que los pasajeros respeten las distancias reglamentarias; punto por el cual se ha colocado afichería en cada uno de los asientos para indicar cuáles permanecer libres.
Por regla general, ningún usuario viaja de pie, aún con el colectivo con todos los asientos reservados ya ocupados.
De cada fila con doble asiento solo se ocupa uno; y en los únicos casos que se registraron de transporte con la ocupación plena permitida son aquellos que se dirigen a zona norte o este.
En líneas que recorren otros puntos, se observó también que los pasajeros; alcohol gel en mano; limpian el asiento que va a ocupar. El portar alcohol en gel para desinfección de las manos se ha vuelto constante entre quienes se trasladan por el centro, sea para trámites varios como para abastecerse de comestibles.
La limpieza y desinfección de las unidades se realiza también de manera periódica, para evitar que el transporte público se convierta en un eventual foco de contagio.
El servicio de los colectivo se imparte en el horario de 6 a 16, el valor del boleto continúa en 24 pesos y como una forma de sobrellevar el faltante de cambio, la empresa “13 de Junio” (propiedad del empresario recientemente fallecido Jorge Otero) otorga “bonos” (boletos) por un valor de 2 pesos, que el usuario puede reutilizar para un próximo viaje.