El pasado jueves 13 de abril, personal de empresa Transporte Urkupiña inició una huelga general en reclamo de pago salarial. Hasta la zona llegó el secretario general de UTA Salta, Miguel Barrera. Si bien los sueldos comenzaron a cobrarse entre el viernes y sábado, la Secretaría de Trabajo llamó a conciliación obligatoria para analizar puntos relacionados con reclamos varios de parte de los empleados.
Barrera explicó que a menos de 48 horas de iniciada la medida de fuerza la pasada semana, nuevamente debido a un atraso en el pago de sueldos por parte de la empresa Urkupiña, el propietario de la misma depositó los montos en las cuentas sueldo de los trabajadores. Por este motivo, el servicio se restableció parcialmente durante las jornadas del viernes 14 y el sábado 15. Sin embargo, agregó, no todo el personal está bancarizado y de allí que algunos no pudieran acceder a su efectivo, pese a estar el monto disponible.
Comenzado esta semana, por ayer lunes 17 ya se esperaba solución al conflicto; en base a información acercada por el propio gremio y la Dirección de Transporte de la Municipalidad. El acuerdo llegó en la noche, pero debido a un llamado a conciliación obligatoria por parte de la Secretaría de Trabajo. “La empresa no tiene caja chica, el sueldo de los trabajadores sale de los subsidios que provee el Estado y la demora en los pagos es una constante, todos los meses (…) eso no puede ser”, resaltaba.
El paro había dejado sin los servicios urbanos en Tartagal y los interurbanos que conectaban la ciudad con las localidades al norte y sur del departamento. “El gobierno debe reconocer que la calidad del servicio que presta la empresa no es buena y que deberían llamar a licitación esos corredores”, manifestó el secretario general de UTA Salta. Entre los puntos que motivaron el llamado a conciliación se reitera el pago de horas extras, cesar con persecución y sanciones a los trabajadores por parte de la patronal, presentación de informes, entre otros.