“Solo cuando perdemos algo valioso, sabemos apreciar la vida”, reflexiona el abuelo junto a un joven artista de trap. Ambos coinciden en una parada de colectivo y protagonizan una conmovedora historia de 20 minutos. El cortometraje se presentó esta semana y fue escrito y dirigido por Laureano Emilio Vera, de General Mosconi.
¿Qué pasaría si la memoria se perdiera? ¿Quién escucharía y quién aprendería? La cultura millenial se encuentra con el pasado y de ese intercambio, que comienza con una pregunta atemporal: “¿Cuál es?”, inicia el viaje por el cortometraje del profesor Emilio Vera, en sus primeros pasos como cineasta.
La belleza de la fotografía y el montaje, donde la luz brinda calidez a pesar del ambiente frío que rodea a la historia, donde la noche también puede ser inquietante pero no terrorífica, sumergen al observador en la mente de un abuelo que lamenta perder sus recuerdos, pero sobre todo, lamenta perder lo querido y no ser capaz de recordar más que destellos.
“Pude recordar algo…estoy contento por eso, que agradable sensación…”, sonríe el abuelo, y el espectador no puede imaginar más que una cinta de moebius y ecos, de la cual emerge o escapa cuando la curiosidad de la juventud asoma.
Emilio Vera presenta en una historia breve la contundencia de una vida que va llegando al ocaso y espera por su transporte como esperando al barquero de las almas, bajo “la regla de avanzar” porque “la vida sin sacrificio no es vivir”.
Si la juventud asoma al “océano de incertidumbre” que es la existencia humana, todo el legado del abuelo, queda en una pregunta: “¿Cuál es?”.