DyN.- Carolina Stanley, ministra de Desarrollo Social, anunció esta tarde la decisión de dar marcha atrás con la baja de decenas de miles de pensiones a personas con discapacidad, pero aclaró que habrá una revisión caso por caso para determinar quiénes no deberían recibir ese beneficio. En el caso particular de la provincia de Salta, son 176 las pensiones suspendidas.
La reacción ocurrió tres días después de que surgieran las primeras denuncias de “errores” en la quita de esos subsidios. Y de las críticas de todo el arco opositor, desde el kirchnerismo, el massismo y la izquierda.
Sin embargo, el impacto mayor en el seno del oficialismo fue la voz de la Iglesia, que alertó sobre esa situación.
También, se difundió la novedad en medio de una protesta en el Obelisco porteño, que convocó a cientos de manifestantes y que, desde el oficialismo, pudieron ver alguna “motorización” desde el ámbito político.
En un comunicado, la funcionaria -que hoy mantuvo una reunión con el jefe de Gabinete, Marcos Peña– reiteró hoy que el Gobierno “va a asegurar el pago de las pensiones a todas las personas que sufren una discapacidad” y advirtió que ha existido una “utilización política de este tema por parte de mafias que lucran con el clientelismo”.
Stanley sostuvo que “lo primero que queremos es transmitir tranquilidad al respecto y que hay un millón y medio de familias que reciben una pensión en la Argentina y que la van a seguir cobrando”.
La ministra explicó, además, que se restablecerán “todas aquellas pensiones de personas que tienen discapacidad y que, por error de aplicación de criterio, pueden haberse quedado sin cobrar la pensión en este último cobro”. E indicó que en esos casos “la van a estar recibiendo la semana que viene”.
Por esa razón, pidió a toda la gente que “tenga la tranquilidad de que van a estar recibiendo nuevamente su pensión“.