La garita que ocupaba Gendarmería Nacional Escuadrón 61; conocida como “El Pacará”; en barrio San Martín, se levantó y cerró esta semana. Era el último puesto de control que la fuerza tenía en actividad luego del cierre de los otros dos en distintos puntos que lindaban con Bolivia. Preocupación de los vecinos por posible incremento de la inseguridad.
Era uno de los últimos controles que tenía Gendarmería en los sectores que lindan con la frontera argentino-boliviana. De acuerdo con el informe del periodista Raúl Costes, el accionar responde a una directiva del Comando Central. Como nota extra, la página oficial de la fuerza no existe y solo se puede seguir su labor a través de cuentas sociales.
La explicación que brindó del Cte. Ppal. César Luis Suglistaler; jefe del Escuadrón 61; sobre el motivo por el cual se removió al personal de la garita es que “así se trabaja mejor en la lucha contra el narcotráfico (…) desde que está ese control, se habían puesto peajes en las casas de frontera que tienen fondo hacia la Quebrada Internacional para pasar clandestinamente las compras”.
La iniciativa estaba decidida desde diciembre de 2017. “Levantando este puesto, la gente pasará libremente y los controles serán ambulantes y rotativos, permanentemente, por la zona de Quebrada”.
Ante la preocupación de los vecinos por incremento de la inseguridad, la fuerza respondió que es deber y tarea de la Policía de Salta, ya que la tarea de ellos es el resguardo de la frontera y lo que ingrese y salga, sea personas o bienes varios.
“Se dijo que en realidad la molestia y preocupación viene por el lado de los vecinos que usufructuaban con la garita, beneficiándose con el cobro de peajes”, finalizó el periodista.