Facundo Bianco, comunicador, tallerista y generador de contenido sobre ciudadanía digital, hizo especial incapié en la necesaria formación sobre bullying, ciberbullying y grooming que necesita la sociedad, a través de un abordaje serio y organizado. Consideró que dividir entre nativos digitales y migrantes digitales alejan comunicación y soluciones, entre otros temas.
Bianco destacó que hay una gran demanda producto de un déficit que preocupa en gran medida a las familias. “Internet les dio a los groomers (acosadores) la posibilidad del anonimato y captar a chicos por más tiempo“, expuso.
A pesar del tenor de los temas; bullying, ciberbullying y grooming; la vergüenza va cediendo lugar a la necesidad de información y reflexión para prevenirlo y actuar. “Hay que entender que nadie está excento a que le pase una cosa de estas (…) nadie tiene todas las defensas activadas”, remarcó.
Contra lo esperado y a raíz de sondeos, encuestas y talleres realizados con los chicos y chicas, solo el 30 por ciento confiaría la situación a sus padres. “Los adultos acompañamos a los chicos en todos los espacios, y en internet no tanto”, reveló, “falta empatía, escucha, referencia del adulto a los chicos”.
Un punto importante, enfatizó, es dejar de lado la dicotomía Nativo Digital-Migrante Digital; “que es una especie de verso”; ya que aleja a los chicos de los adultos; llegar a decir “no entiendo la dinámica propia de internet” en el caso de los adultos.
“Se debe tener en cuenta que a los chicos, los supuestos nativos, la conceptualización les cuesta (violencia de género, privacidad, seguridad) y es ahí donde entra el rol adulto”, remarcó.
“Un adulto manipulando a un niño en redes sociales es acoso y punto”, teniendo en cuenta que hay estadísticas que señalan a los 10 años como edad en que los chicos ya tienen un teléfono; “pero en el secundario ya todos tienen el suyo”.
“Los chicos no tienen real dimensión de lo que significa la privacidad y la exposición en las redes sociales, en internet (…) la perdurabilidad, lo determinante en que se ha convertido internet como primer filtro de todo (…) sobre todo hay que tener una buena política de contraseñas y reflexionar sobre los contenidos que se comparten en las redes sociales”, cerró.