Ministerio Público Fiscal.- El Tribunal Oral Federal Nº 1 de Salta, presidido por el juez Federico Díaz e integrado por los vocales Marcelo Juárez Almaraz y Marta Liliana Snopek, inició este miércoles el juicio a Ramón Jesús Cortez y Teodoro y Enzo Arias por el delito de transporte de estupefacientes agravado por el número de intervinientes y la utilización de una persona menor de edad. Entre ellos se encuentran los proveedores de la droga que la organización pretendía llevar a Salta para su comercialización.
Los tres acusados formaban parte de una organización que fue desarticulada el 18 de octubre de 2019 como resultado de una investigación llevada adelante por la Procunar, en la cual se logró el secuestro de 29 kilos de marihuana y la detención de 11 personas, entre ellos Juan Lapad y su hijo Sergio, quien también llevaba la voz de mando entre los implicados. El caso llamó la atención en Salta, pues Juan Lapad es hermano del actual senador por el departamento Rivadavia y vicepresidente primero la Cámara de Senadores de la provincia, Mashur Lapad, connotación política que, según lo aludido por la fiscalía, era utilizada por los líderes de esta organización.
Ante la contundencia de las pruebas reunidas, entre mayo y junio de ese año ocho de los imputados optaron por someterse a un proceso de juicio abreviado. Así, Juan Lapad y su hijo Sergio fueron condenados a la pena de seis años de prisión por los delitos de transporte agravado por el número de intervinientes y la utilización de una persona menor de edad. Eduar Santillán, quien acordó el ingreso de la droga desde Paraguay, al igual que Nicolás López, conductor del auto en el que se transportaban los 29 kilos de marihuana, recibieron una pena de 4 años de prisión por los mismos delitos.
Marcelo Cruz, Diego Juárez, Luis Figueroa y Eva Choque, otros integrantes de la organización, fueron condenados a tres años de prisión. A instancia de la fiscalía se dispusieron multas a los acusados que van de la suma de 100 mil a más de 1 millón de pesos, en el caso de Juan Lapad. También se ordenó el decomiso de los vehículos secuestrados, entre ellos una camioneta Ford 100 y una Chevrolet modelo Montana.
Alegato
Tal como lo prevé el Código Procesal Penal Federal, el debate se abrió ayer con el alegato de apertura de la fiscalía, en este caso a cargo del fiscal general Eduardo José Villalba, de la Unidad Fiscal Salta, quien detalló los hechos imputados a los tres acusados. “Como pocas veces sucede, en esta ocasión la fiscalía trae al tribunal a todos los componentes de una organización. Es la película completa, con todos los protagonistas, desde los actores de reparto hasta los que tenían roles de mando en las maniobras de narcotráfico”, resaltó Villalba.
Asistido por los auxiliares fiscales Mariana Gamba Cresmaschi y Jorge Viltes Monier, del Área de la Procunar NOA, el fiscal explicó cómo cada uno de los imputados, con excepción de Arias y Cortez, ya fueron condenados a través del sistema de juicio abreviado, posibilidad contemplada por el nuevo modelo acusatorio. “Desde la Procunar NOA se logró identificar y detener a todos los implicados, desde los proveedores de la droga, ingresada desde Paraguay, hasta cada uno de los eslabones que participaron en el almacenamiento y traslado a Salta, siendo capturado también el jefe de la organización”, reseñó Villalba.
El fiscal general recordó que la investigación se inició el 26 de julio de 2019, pero que recién se pudo desarticular el 18 de octubre de ese año, cuando en “tiempo real” se coordinó el seguimiento del convoy que la organización había tramado para el traslado de la droga desde la localidad fronteriza de Morillo a la capital.
Roles
El fiscal explicó que, en ese entramado, indicó que Cortez tuvo un rol preponderante, pues tenía nexo directo con Juan Lapad, a quien le reportaba el resultado de las maniobras en el norte provincial. Además, dijo que cumplía el rol de “barrer” la ruta de tránsito, o bien hacer de coche “puntero”, tareas clave dentro de la organización, pues así se garantizaba la seguridad del traslado de la droga.
“Bajo el mando de Sergio Lapad, ejecutor de las órdenes de su padre en la zona norte, Cortez debía recorrer la ruta e informaron sobre los controles de las distintas fuerzas de seguridad; incluso, cuando se decidió concretar el transporte de los 29 kilos de marihuana, iba de coche puntero”, explicó. Respecto a Teodoro Arias y de su hijo Enzo, Villalba sostuvo que, de las investigaciones realizadas, existen suficientes elementos de prueba que permiten establecer que los mismos fueron los proveedores de la droga.
“Los Arias eran los responsables de obtener y trasladar la droga desde el límite con Paraguay hasta Morillo, desde donde Sergio Lapad retiró la carga para su traslado a Salta, donde se distribuía en distintas bocas de expendio”, señaló. Villalba se refirió también al fuerte peso que la organización, por sus nexos de orden político, tenía en el norte. “Se trata de conexiones importantes, las cuales le daban cierto resguardo, lo cual surge incluso de las pesquisas realizadas”, apuntó. Por último, el fiscal mencionó las pruebas reunidas y que serán presentadas a lo largo del debate, entre ellas documentales, testimoniales, informes e intervenciones telefónicas que demuestran, paso a paso, el accionar de cada uno de los integrantes de la organización.