El 12 de Octubre de 2009, en Salta Capital y a los 77 años, Eduardo Fortunato Esper fallecía producto de un accidente cerebro vascular. Estudió y se recibió de aviador civil, creador de la “Cacharpaya” en Cosquín, impulsor de hoy tradicionales festivales folklóricos y artistas del ámbito, conductor de radio y televisión. Había nacido el 15 de diciembre de 1933 en Tartagal.
“El Tuna” Esper, como impulsor de artistas, creó la Fiesta Nacional e Internacional del Palo Santo en Tartagal, encuentro que brilló en la década del 70, y que en 2008 buscó recuperar con la presentación de “Los Huayra” (hoy reconvertidos en “Ahyre”) en escena, ante el potencial de los jóvenes folkloristas. “Le afectó mucho el que la Municipalidad no hubiera acompañado como esperaba”, recordó el periodista José Cervantes sobre el festival, en cuya organización acompañó.
Fue periodista, conductor de programas radiales y televisivos, director de Radio Nacional; en los cinco años previos a su fallecimiento estuvo al frente del programa “Y vamos todavía”, donde desplegaba conocimientos y cultura en diversos temas; a veces en compañía de su amigo Rodolfo “Rudy” Pulido, centrados en folklore y tango, historias del Tartagal de antaño y anécdotas de la época.
Así, a lo largo de su carrera, reunió más de 130 reconocimientos; incluyendo su citación en la zamba “Corazón de mango” (dedicada a Tartagal por Alazán Cortez y Héctor Schmuck) y su nombramiento de Padrino de la Universidad de Cuzco (Perú). Radio FM Alba 89.3, última casa de “El Tuna”, impuso su nombre en el estudio 1 de la emisora, en 2021.