La Dra. Valeria Sánchez, de Tierras Fiscales de la Municipalidad, informó que los terrenos donde se levanta comunidad Pueblo Nuevo son propiedad de la familia Falcón y fueron donados hace 10 años por un apoderado designado por su titular. Dos mujeres fueron permitidas de residir en dos terrenos por el cacique, pero una mujer de apellido Sosa se presentó como dueña y amenazó a ambas para que abandonen el lugar o le paguen 35 mil pesos por terreno.
Dos mujeres; una con dos hijos y la segunda con siete; ingresaron a ocupar dos terrenos de 10×20 en comunidad Pueblo Nuevo, en noviembre de 2020, según las declaraciones de una de ellas. A inicios de año, una mujer a quien identificaron como Patricia Sosa, junto a Julia Chávez (coordinadora presidenta de mujeres de las comunidades indígenas) y una tercera, Patricia Castillo, las intimaron a abandonar los terrenos, si no les pagaban 35 mil por cada uno. “Esta mujer que se dice dueña ha estado vendiendo terrenos ya, diciendo que le fueron donados por su mamá“, declararon.

Sosa se llamó propietaria de los terrenos, y de acuerdo con el cacique Víctor Hugo Ruiz (a quien la misma comunidad no reconoce como tal), la mujer donó esos terrenos para la construcción de un merendero. Junto a varios de sus partidarios amenazaron a las mujeres en sus propios hogares, incluso con sus hijos. Para poder garantizar la seguridad de estos, las mujeres aceptaron en primer lugar llegar a un acuerdo, pero les ofrecieron vivir a escasos metros de la línea de gas que corre por el lugar. “Nos dijeron que si tanto necesitamos donde vivir lo haríamos donde ellos nos daban”, remarcaban.
Consultada, la Dra. Sánchez; directora de Tierras Fiscales; recordó que los terrenos pertenecen a la familia Falcón. Una parte de ellos fueron donados a la comunidad hace 10 años y un sector al lado se encuentra en tratamiento jurídico con provincia para la compra de los mismos. “Es decir, nadie puede decirse dueño de esos terrenos porque no lo son (…) las mujeres deben radicar las denuncias por violencia de género y agresión. Además, nadie debe caer en estos tratos de compra-venta porque son tratos entre particulares sin títulos de propiedad (estafas)”, cerró.