Un periodista fue denunciado por violencia de género por razones que acusa infundadas, hecho que ocurrió a poco de finalizar el mes de abril, pero trascendió esta semana. La parte acusada señaló que esta denuncia imposibilita que pueda realizar cobertura de noticias en el ámbito público sanitario, ya que por la denuncia radicada también se estableció una orden de restricción.
El periodista, movilero, relató que los hechos se remiten al día 23 de mayo. En ese momento estaba en guardia periodística junto a otra periodista, cuando observó que la mujer en cuestión iba y venía por la vereda de enfrente, mientras captaba imágenes con su celular; con disimulo; de ambos en el lugar.
“Saco mi herramienta de trabajo, mi celular, me cruzo de vereda y la empiezo a grabar (…) le pregunto por qué me estaba filmando. Ella empezó conque Yo no te estoy grabando, que Te perseguís, que Me estás ejerciendo violencia, que Sos un violento, que Siempre me faltás el respeto”, relató.
Como la mujer continuó insistiendo que era víctima de violencia de género y a los gritos, el periodista optó por retirarse del lugar, no sin antes despedirse de la periodista.
A los pocos días, (jueves) le llegó una citación por Violencia de Género. “Fui a la (Comisaría) 42 y pregunté si había una denuncia contra mi y me dijeron que no había nada. Me fui al Juzgado y ahí me encuentro conque hay una denuncia contra mi persona por Violencia de Género, además de una orden de restricción”, continuó.
En consecuencia, no puede acercarse al lugar de trabajo de la denunciante a menos de 200 metros, como tampoco puede hacer publicación o declaraciones que la perjudiquen,“porque la justicia me aplica una multa por 2 mil pesos por cada publicación”; esto por 90 días.
“Me cercenan mi libertad de trabajo, porque yo no puedo acercarme a un edificio público”, dijo Nogales. “La justicia, sin mediar pruebas, me aplica una sanción (…) me suena a armado, porque la otra parte trabaja en el ámbito administrativo público”, remarcaba.
“Creo que hemos expuesto una situación que los dejó al desnudo (dengue), que es muy evidente y no se puede tapar ni con montajes ni con declaraciones (…) esta mujer es el instrumento justo para que me saquen del lugar”, respondió.
Agregó que recurrió a un defensor público para poder hacer su descargo, acceder al expediente realizado y aportó la grabación que registró ese día como prueba para su defensa.