El Servicio Meteorológico Nacional anuncia la llegada de lluvias y tormentas de variada intensidad para el norte argentino, pronóstico se espera pueda cumplirse para aliviar la situación de incendios en la región. El titular de Defensa Civil Tartagal; Rolando Álvarez; informó que en sobrevuelo detectaron que la cantidad de focos disminuyeron pero los que persisten registran gran intensidad.
Álvarez informó que ayer se relevó la zona afectada por incendios forestales en vuelos coordinados con la Dirección Provincial de Aviación Civil, sobrevolando zona del Santuario; entre otros focos. La mayoría se registran en altura o en lugares inaccesibles por vía terrestre.
“Hay menos focos de fuego que hace 15 días, pero los que quedan son de gran intensidad”, detalló. Sobre el Santuario, la línea de fuego se situó a 1 km (1.000 metros), lugar donde Bomberos de Policía y Voluntarios vienen trabajando hace tres días.
El fuego se aprecia desde la estación 9; del camino de ascenso al Mirador de la Peña; hasta el Balcón de la Cruz. “En el norte tenemos vientos de velocidad de 2 a 7 metros/segundo y hemos llegado a vientos de 32 metros/segundo (…) Hace 40 días que se viene combatiendo focos en Salvador Maza, Aguaray y Tartagal (…) pero incendios venimos registrando desde junio”.
La situación crítica se extiende desde Piquirenda hasta Virgen de la Peña. “Tenemos incendios que se distribuyen a lo largo de toda la zona oeste del departamento (…) hemos llegado a notificar llamas de entre 15 a 20 metros de altura, que son lo que queremos abordar con asistencia aérea ya que son difíciles de alcanzar y la mayor parte del trabajo lo hacemos a nivel tierra”, continuó.
Para las próximas 72 horas se aguarda la llegada de equipos hidrantes para combatir los incendios, petición que ya se articuló con el Servicio Nacional del Manejo de Fuego perteneciente al Ministerio de Ambiente de Nación. “Los aviones están trabajando en el Parque Nacional Calilegua (Jujuy) este domingo (se quemaron casi 1.000 hectáreas)”.
Se considera la presencia de dos helicópteros con gancho para cargar 800 litros por viaje, que no precisa descender a tierra para abastecerse y puede realizarlo directamente desde una fuente de agua; en este caso El Limón, ubicado en línea recta al Santuario, por ejemplo.
En el caso de avión hidrante, sí se necesita aeropuerto, camión cisterna para abastecer (la capacidad es tres veces mayor a la del helicóptero) y camión con combustible. “Este tipo de operativos ya se hizo en los últimos 10 años en Tartagal y el departamento“, aclaró Álvarez. Otro punto que preocupa es La Toma, también rodeada por fuego pero en altitud.
Finalmente, llamó a que los ciudadanos sean conscientes sobre el uso del fuego para desmalezar, dada la sequedad que registra el monte por la extensa sequía que asola a la región. “El sábado fue un día muy crítico porque casi se pierden dos empresas grandes (zona norte), un hotel y un aserradero por quema de pastizales iniciado por particulares”, concluyó.