
Residentes cercanos al asentamiento “Gialdias” armaron una Comisión de Vecinos para autorizar la radicación de interesados en vivir allí. Esto, con el fin de evitar que oportunistas lucren con la necesidad de la gente. “Quien busque asentarse acá, debe construir y vivir. Si construyen y ponen a otro, se tienen que ir”, dijo una de las integrantes de la Comisión. Ese terreno en particular se encuentra bajo juicio de sucesión desde hace tres años y se espera un fallo de un momento a otro.
Los terrenos donde se ubica el asentamiento se encuentran bajo juicio de sucesión y se encuentran cinco cuadras al norte de Plaza 9 de Julio. Una parte de la familia propietaria (cuya titular registrada es Marina Saldías) compuesta por 4 hermanos y que disputa el espacio tiene a dos de ellos residiendo en Grecia y el resto fuera de Salvador Mazza.
En tanto, los espacios están abandonados y vacíos. No hace mucho sucedió un fuerte cruce en ese lugar entre quienes se identificaron como apoderados y asentados en el terreno, informó el periodista Raúl Costes.
La contienda por la titularidad familiar de los espacios ya lleva tres años y de acuerdo con la información que manejan los vecinos de alrededor, se espera que defina de un momento a otro. En tanto, residen allí 50 familias en los 174 parcelados en que lo dividieron y certificados por el Renabap.
Atentos a que este tipo de espacios son codiciados ante el déficit habitacional, se organizaron bajo una Comisión de Vecinos y desde alli controlan las intenciones de quienes pretenden afincarse. “Cuando la gente se mete en los terrenos, recién aparecen los supuestos responsables de los dueños y vienen a hacer problemas (…) nosotros vamos a apoyar al que lo necesita, porque les costó levantar su casa, estuvieron bajo el sol, la lluvia”.
“Se trata de 174 parcelas que deberían estar habitadas (…) entre la gente que se metió está la que desalojaron del asentamiento de 18 de Marzo (…) algunos levantan una casita y dejan alguien cuidando (…) otros tienen real necesidad. y el que quiera ocupar este lugar, tiene que quedarse a vivir”, remarcó otra de las integrantes de la Comisión.