
Tres docentes, una de ellas del departamento San Martín, anunciaron esta mañana que iniciarán una huelga de hambre, en disconformidad con la postura de la ministra Analía Berruezo. “Ni la ministra ni el gobernador saben lo que es trabajar en una escuela carente de recursos”, enfatizaron. Esta tarde, en asamblea provincial, los maestros definen si continúan o no el paro.
La docente Claudia Valor; de Tartagal y maestra en Campo Durán; manifestó que la medida de fuerza fue decidida al estudiar en detalle el recibo de sueldo de este mes.
“La señora ministra (Analía Berruezo) tiene una postura muy soberbia”, mientras aclaraba que los montos de aumento que se observaron en el resumen en realidad corresponde a porcentajes atrasados; retroactivos; y que en Septiembre no estarán.
Junto con Valor también llevan adelante su huelga de hambre las maestras Neri Saldías y Marta Miranda; todas de Tartagal. “Somos mujeres separadas, divorciadas y con hijos en la Universidad y vivimos con nuestros padres porque no tenemos hogar (…) no alcanza para pagar un alquiler y no podemos acceder a una casa porque el gobierno exige que sean familias”, remarcó con dureza la educadora.

Valor dijo también que los delegados; anoticiados de la medida que iniciaban hoy; les habían solicitado que la pospusieran por lo menos hasta que finalizara la asamblea provincial convocada desde las 15 horas de este miércoles 31 de julio en el Centro Vecinal de Barrio 20 de Febrero; en Capital.
Allí, la docencia que todavía mantiene el paro (entre un 65 y un 70 por ciento en toda la provincia) determinará si continúa o no con el mismo, habida cuenta que el gobierno provincial dio por cerrada la mesa de diálogo y anunció recortes en el sueldo para aquellos maestros que no volvieran a las aulas a partir de hoy.
“Ni la ministra ni el gobernador saben lo que es trabajar en una escuela carente de recursos”, lamentó, “no ven que muchas veces los docentes sacamos de nuestro bolsillo para ayudar a nuestros alumnos, para los actos y para el transporte; aparte de todos los gastos que tenemos. ¿Qué quieren? ¿que trabajemos ad honorem para el Estado, cuando vemos que un concejal tiene una dieta de 28 mil pesos comparados con los 16 mil pesos de un docente que recién inicia?”.
Tampoco olvidaron mencionar la crítica y peligrosa situación de docentes en parajes y puntos alejados, evocando a Evelia Murillo (asesinada en El Bobadal en 2014) y María Esther Coca (agredida por un ladrón en Campo Largo este 2018).