Carlos Javier Calvimonte, Gaspar González y Ernesto Alemán; condenados a cadena perpetua en 2019 por el crimen del panadero Luis Nino; fueron absueltos por los jueces Pablo Arancibia, Pablo Mariño y Guillermo Pollioto, a raíz de la apelación del abogado Marcelo Arancibia por su defendido; Calvimonte. El Tribunal consideró que sus pares Martoccia, Vázquez Sgardelis y Vásquez basaron su fallo en rumores y no en pruebas concretas. La familia del panadero repudió el reciente accionar judicial.
El fallo se difundió a través de medio provinciales, pero no hay un comunicado de prensa oficial compartido en las páginas oficiales de la justicia salteña; sea del Ministerio Público Fiscal o el Poder Judicial. Los magistrados Pablo Arancibia, Pablo Mariño y Guillermo Pollioto determinaron que el principal implicado en los hechos; Tomás Parada; es el único que cumplirá la condena de cadena perpetua por el asesinato de Luis Nino.
La víctima había desaparecido en la mañana del 17 de mayo de 2017, en Salvador Mazza, cuando realizaba la distribución de pan y su cuerpo fue hallado 10 días después, el sábado 27, en una finca ubicada cerca de las serranías del Río Capararí. En el rastrillaje previo había participado incluso la Policía Boliviana, en la zona de la Quebrada Internacional.
Ahora, los jueces Arancibia, Mariño y Pollioto, sin embargo, decidieron aceptar la apelación del abogado Arancibia, afirmando que la Policía manejó la hipótesis que Nino fue víctima de un ajuste por el robo de 200 kilos de droga. El tribunal se basó en los antecedentes del panadero; quien vendía drogas al igual que Parada; contando entre sus clientes a Calvimonte.
Los magistrados aseguran que se actuó en base a rumores, lo cual llevó a la detención y condena de los ahora liberados, y remarcaron que los testigos que la Fiscalía llevó a declarar en el juicio de 2019 no tuvieron firmeza en sus dichos para sostener la teoría de un ajuste de cuentas. Aún así, manifiestan, el 19 de septiembre de ese año, los jueces Ricardo Martoccia, Anastasio Vázquez Sgardelis y Asusena Vásquez condenaron a los detenidos, presos desde mayo de 2017.
El abogado Arancibia hizo hincapié en que su defendido fue incluido en la causa en calidad de “entregador” debido a su afición a las sustancias. Con críticas hacia el accionar policial y Fiscalía, el fallo difundido indica que “dado que no existe convicción razonable en contra del acusado, resulta ajustado a derecho absolver a Calvimonte y disponer su inmediata libertad”, con lo cual y en el resto de los fundamentos, se resolvió también la absolución de Alemán y González.
Al respecto, el periodista Raúl Costes; pariente de Luis Alberto Nino; recordó que hubo dos fiscales a cargo de la investigación, señalando que por el crimen del panadero es que el entonces procurador de Salta; Pablo López Viñals; decidió la creación de la Fiscalía de Graves Atentados contra las Personas, colocando como titular al Dr. Pablo Cabot. Con esta nueva unidad, el fiscal penal de Salvador Mazza, Dr. Armando Cazón, fue apartado y toda la investigación se derivó a Cabot.
“Los dos fiscales llegaron a casi las mismas conclusiones”, remarcó Costes. “El fiscal Armando Cazon, (…) realizó un trabajo impecable, logrando hallar el cuerpo de la victima, deteniendo a los autores materiales y cómplices (…) todo esto en el lapso de tres meses y en base a las investigaciones, en las cuales recogió testimonios, pruebas, elementos, etc, que determinaron el esclarecimiento del crimen”.
Sobre el accionar de Cabot, reseñó que en el termino de un año y medio aportó otros “testigos” de dudosa procedencia, que desvirtuaron “un poco” el proceso de investigación inicial. “Cabot no quiso recibir a ningún familiar de la victima”, lamentó. Del grupo inicial de cinco acusados que llegaron a juicio, solo la pareja de Tomás Parada fue liberada.
“La familia esta muy atemorizada a partir de que se enteraron de la liberación y vieron a algunos de estos asesinos en la calle como si nada hubiera pasado (…) Temen represalias, venganza, etc, por parte de estos delincuentes”, cerraba Costes.