EconoJournal.- La destilería que opera Refinor en el paraje Campo Durán, situada a unos 45 kilómetros al norte de Tartagal, viene atravesando una situación crítica. La producción de la cuenca del NOA ha venido cayendo debido al agotamiento de los campos maduros.
A su vez, Bolivia inauguró a fines de 2015 la planta de procesamiento de gas Gran Chaco; bautizada Carlos Villegas; y redujo bruscamente los envíos de gas natural para su industrialización. En ese contexto, la refinería inició un proceso de restructuración que incluye reducción de personal, incluso en puestos clave del complejo.
El complejo de Refinor tiene una capacidad de procesamiento de 20,3 millones de m3 por día de gas para obtener los subproductos propano, butano y GLP, pero al no tener materia prima suficiente para justificar esa estructura su futuro es incierto. A fines del año pasado la empresa informó que estaba procesando apenas unos 6 millones de metros cúbicos diarios.
Fuentes que conocen la compañía de adentro aseguraron que en la actualidad el complejo Campo Durán se encuentra sin gerente de Operaciones ni gerente de Seguridad, Higiene y Medio Ambiente.
“Lo gravísimo de esta situación es que las plantas que componen el complejo siguen operando normalmente, pero sin personal que supervise y realice las tareas de operación y mantenimiento necesarios para que funcione en condiciones de seguridad lógica”, señalaron.
Además, las mismas fuentes informaron que en septiembre se despidió personal fuera de convenio que cumplía funciones de supervisión y jefatura y remarcaron que existiría un acuerdo con el gremio para avanzar con despidos de personal que se encuentra dentro de convenio.
La respuesta de Refinor
La empresa afirma que “en el marco de la situación actual de la industria, y principalmente debido a la declinación en la producción de la cuenca del NOA, en Refinor encaramos un profundo proceso de transformación de nuestros negocios, con el objetivo de garantizar la sustentabilidad de la compañía a largo plazo, sostenida en nuestra misión, visión, valores y cultura del trabajo seguro”.
También, la empresa agregó que, “esta nueva estrategia potencia los activos vinculados a la prestación de servicios logísticos para el abastecimiento de nuestra propia red de Centros de Servicios y la de terceros. Para fortalecer el vínculo con nuestros clientes, iniciamos un proceso de reconstrucción de identidad de marca en nuestro negocio de retail, potenciando nuestra relación a través de atractivos programas de fidelización y brindando la mejor calidad de productos y experiencia al consumidor”.
En lo que refiere a las inversiones, Refinor remarcó: “Esta gran transformación como empresa, implica grandes inversiones a lo largo de todos los activos que abarca nuestra compañía, que se encuentran principalmente en la región NOA y llegan hasta la provincia de Córdoba, cambiando el foco estratégico del negocio y readecuando algunos de nuestros activos. En este marco, nos encontramos en un estado avanzado de evaluación de distintos proyectos tendientes a revalorizar nuestro sistema de transporte por ductos, inclusive, con la posibilidad de vincularnos al sistema de ductos de Bolivia”.
Por último, la compañía remarcó que “se aprobó una nueva estructura que apalanca esta estrategia basada en la eficiencia y la integración de nuestros negocios. Con esta premisa, iniciamos la reconversión de nuestros procesos y sus recursos asignados, dejando de tener una mirada local, para pasar a tener una visión global y transversal de todos nuestros activos.
Nuestros proyectos requieren importantes inversiones en los ductos y plantas, acompañados también de una estrategia de inversión social basada en la sustentabilidad, que nos genera cercanía y potencia vínculos de largo plazo con las comunidades en las que operamos. La implementación de estos proyectos requiere un fuerte respaldo de los gobiernos de las provincias en las que operamos, con gran foco en Salta, como así también de las autoridades nacionales, para poder llevar adelante con éxito toda la transformación de la compañía y que se generen las condiciones necesarias para que la cuenca productora del NOA continúe desarrollándose y revierta la tendencia declinante de los últimos años”.
La respuesta de Pampa Energía
La composición accionaria de Refinor tiene a YPF con el 50%, Pampa Energía con el 28,5% y Pluspetrol con el 21,5%. Por una cláusula en su constitución empresaria, la operación del complejo Campo Durán corresponde a las acciones que posee Pampa Energía.
Según informó Pampa Energía sobre esta situación y la empresa respondió: “Se está redimensionando y redefiniendo el uso de los activos de Refinor para hacerla más sustentable. Tiene activos muy valiosos y estratégicos para el país, como el poliducto que conecta Córdoba hasta la frontera con Bolivia, con la potencialidad de poder exportar productos por esa vía. Además, la compañía está esperando que la provincia de Salta defina las condiciones de la concesión de la exploración en el área de Los Blancos, dentro del yacimiento Chirete, para intensificar la producción de petróleo que podría alimentar la refinería”.
YPF, en cambio, prefirió no hacer comentarios.